Review: "Vikingos", la nueva serie histórica que conquista audiencias
“Vikingos” narra las hazañas de Ragnar Lodbrok, un granjero rebelde que pretende cambiar las rutas de saqueo hacia el oeste con la promesa de una tierra infinita con grandes riquezas. El Ragnar televisivo, al igual que el personaje histórico en que está basado, es también un poderoso guerrero que ansía destacar para captar la atención de los dioses. La rivalidad entre Ragnar y su hermano Rollo (Clive Standen) que se deja entrever en el primer capítulo promete giros emocionantes en la trama principal del héroe vikingo.
Dejando a parte la rigurosidad histórica que esta serie parece respetar, existen muchos factores que hacen atractiva a esta producción. Los escenarios son paisajes de bosques y fiordos en Irlanda, donde se graba la serie; y los vestuarios y peinados son tan atrayentes como verosímiles, teniendo en cuenta la poca información que se posee de la época. Los actores y actrices en general son el cliché de los nórdicos robustos y atractivos. A decir verdad, el actor australiano que encarna a Ragnar (Travis Fimmel) se parece una barbaridad al Brad Pitt de hace unos años y su esposa en la serie Lagertha, la doncella escudera (Kathryn Winnick) es fuerte al mismo tiempo que cumple el estereotipo de diosa escandinava.
Podría comparar a “Vikings” con “Juego de Tronos” en el sentido de que ambas tienen ambientación en la Edad Media y tienen un diseño de producción espectacular, pero una está basada en una novela fantástica y la otra en una etapa de la historia real del norte de Europa, y la diferencia se hacer notar. Las situaciones que se dan, la forma de relacionarse entre los personajes, los diálogos, los poblados y los roles sociales… todo tiene mucha lógica en esta serie, independientemente de que sea una realidad algo dulcificada o novelada. La violencia tiene la dosis necesaria que se puede esperar en una serie de la edad media y sin embargo la visión que ofrece esta serie de los vikingos es muy humana y fuerza la empatía. El sexo también es abordado con frecuencia en la serie pero de un modo más light que en “Espartacus” o “Roma”.
El cliché de bárbaros se diluye entre las intrigas palaciegas, historias de amor y guerra, religión y la eterna lucha de poder entre los hombres. El ritmo de la narración es ágil y no deja un minuto para el aburrimiento.
Gran parte de las historias narradas en los capítulos se basan en personajes históricos reales y en historias de saqueos y exploraciones escandinavas recogidas en textos del siglo XIII. Su creador, Michael Hirst, es también el creador de producciones históricas de éxito como “Elizabeth”, “Los Tudor” y “Los Borgia” lo cual me inspira confianza a la hora de calificar esta serie. Teniendo en cuenta el tirón que está teniendo últimamente el género histórico mezclado con fantasía, parece que sea el momento perfecto para lanzar una serie como “Vikingos”.
Personalmente, me está apasionando conocer en mayor profundidad las creencias y costumbres de los personajes. Es muy interesante ver cómo las leyendas de la mitología nórdica cobran vida cuando en un campo de batalla se ve aparecer a las valkirias elevando a los guerreros más heroicos hacia el Valhalla. Es una serie que consigue acercar al espectador a un universo muy interesante y poco explotado televisivamente.
El estreno en España de la primera temporada ha tenido buena acogida y ya han empezado a salir los primeros spoilers de la 2ª temporada, que sin duda pinta interesante. Todavía tenéis tiempo de poneros al día hasta el estreno de la segunda entrega el próximo año en EEUU. Es una serie histórica que para los amantes de la ficción y la cultura nórdica es algo que vale bastante la pena ver.
El estreno en España de la primera temporada ha tenido buena acogida y ya han empezado a salir los primeros spoilers de la 2ª temporada, que sin duda pinta interesante. Todavía tenéis tiempo de poneros al día hasta el estreno de la segunda entrega el próximo año en EEUU. Es una serie histórica que para los amantes de la ficción y la cultura nórdica es algo que vale bastante la pena ver.