"Noah": un cortometraje hecho con pantallazos









«Al final, el único lugar en el que puedes tener una conversación 
honesta es con un extraño, en el medio de la noche»


La rutina de Noah comienza con un conocido y amplio Do mayor en su Mac, dándole la bienvenida. En la barra de inicio tiene el explorador, primera parada: Youporn. Abre el Facebook, cotillea, habla con su novia y se citan en Skype. Mientras ella le pone al día, un vídeo porno se proyecta en silencio en la pantalla, mientras se sincera él revisa sus fotos, abre un videojuego online, contesta a un amigo.

En este cortometraje dirigido por Walter Woodman y Patrick Cederberg, y ganador en el festival Internacional de Cine de Toronto, la vida de Noah se muestra en una pantalla, varias ventanas, movimientos de ratón, manos ansiosas sobre el teclado, Itunes, Facebook, Chatroulette... Son 17 minutos de empatía para los millones de usuarios de redes sociales, consumidores de datos y rastreadores de ocio en Internet. Son 17 minutos de puro reconocimiento para una generación que vive por y para la Red, atada a un código cada vez más extendido.


Aunque parezca una captura de pantalla, esto es lo que siempre ve el espectador


En un estilo narrativo tan simple y efectivo como pueda imaginarse, "Noah" pone en tensión al espectador, le hace partícipe de su paranoia, le muestra el drama que puede sufrir una generación que ha cambiado las reglas de comunicación, que ha roto con los hábitos que hasta hace poco dominaban las relaciones interpersonales. Las posibilidades de Internet son infinitas y Noah las explora hasta convertirse en un hombre que necesita con desesperación lo que siempre tuvo al alcance: una conversación sincera.


Noah, el protagonista, malgastando su tiempo en Chatroulette


No es coincidencia que este cortometraje haya sido premiado precisamente en el TIFF, el festival que ya se considera la antesala de los Oscar por el éxito que alcanzan las películas ganadoras. "Noah" es el ejemplo perfecto del tipo de producto que se presenta en Toronto: nuevo, arriesgado, agudo. El espectador está visualmente más educado que nunca y necesita nuevas formas de hacer cine y de ver cine, y este cortometraje puede marcar el futuro de muchas producciones, por ser contemporáneo y de presupuesto ajustado. De hecho, ya se han visto formatos similares en televisión con relativo éxito, como Catfish

Lo mejor del corto es que es siniestramente real; pasados unos minutos el espectador está observando la rutina de millones de personas y el caso particular de Noah, que ya no es actor sino un perfil más en la Red. Este realismo es el resultado de un ejercicio de documentación que, si para algunos tendría que ser exhaustivo, para estos dos jóvenes realizadores se trata simplemente de una imitación de su experiencia como internautas. Así el cortometraje está lleno de detalles que lo dotan de verismo: el protagonista recibe mensajes con "jerga web", se distrae con el videojuego viral QWOP, mira fotografías de "lolcats" o habla de jugar a "COD" (Call Of Duty). 



Una conversación de Skype con su novia Amy


"Noah" es algo descorazonadora, un ejemplo crudo de la soledad y falsa experiencia vital que sufren millones de usuarios. La inquietud está asegurada y las preguntas también: más de uno se replanteará su vida online. Esa era la intención de los realizadores, que aprovecharon los beneficios de Facebook para promocionar el corto, creando perfiles falsos para los protagonistas, y así de paso poner de manifiesto su argumento. Como explica Cederberg, "el mayor problema con Facebook es que le da a la gente la posibilidad de crear una personalidad para sí mismos que puede no ser del todo honesta". 



Aviso: el siguiente vídeo puede contener imágenes de sexo explícito.





Por supuesto, no sólo en Canadá se utiliza en lenguaje 2.0 para hacer productos audiovisuales... Prueba de ello es esta webserie española, lavida.es, que se basa en los mismos principios que Noah: producción barata, producto original y temática de actualidad. Directa como una bala a esta generación de nativos digitales. Os dejo con el primer episodio, "Cagarla", que es muy corto y entretenido:




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