"Orange is the new black" y la vida en prisión

“Orange is The New Black” es la serie revelación de este verano. De los creadores de “Weeds”, producida por Lionsgate y distribuida exclusivamente por Netflix, “Orange” está basada en la autobiografía de Piper Kerman, que relata su experiencia en la cárcel.

La protagonista de la serie, Piper Chapman (Taylor Schilling), al igual que la verdadera Piper, acude a prisión a entregarse por haber cometido un crimen de tráfico de dinero relacionado con las drogas, y es sentenciada a 15 meses. En la cárcel, el espectador experimenta, a través de los ojos de Piper, el racismo, la violencia y la homofobia que reina en la prisión, la corrupción y el abuso que ejercen algunos oficiales e incluso el trato de favor que en ocasiones ella misma recibe por ser “de familia bien”. También se muestra la camaradería, la familiaridad, la solidaridad y el amor que existe entre las prisioneras, que intentan sobrevivir dentro de la sociedad que se forma en la cárcel. 

Destacan varios factores en “Orange is the new black”. El primero es el guión, una mezcla suprema entre comedia y drama, que no se aleja de la dura realidad de la prisión pero que al mismo tiempo consigue arrancar más de una carcajada. El elenco de actores, mayoritariamente femenino y muy diverso, derrocha talento, sostiene el guión y da vida a un grupo de personajes que huyen en todo momento del cliché que Hollywood nos tiene acostumbrados a ver, tanto en cuestiones de raza como de sexualidad.

Cada episodio se dedica a una de las compañeras de prisión de Piper y a través de flashbacks se da a conocer su pasado, creando personajes tridimensionales, complicados, que despiertan simpatía e incluso ternura. En este sentido, “Orange” no demoniza a las prisioneras a pesar de sus crímenes, los cuales son desvelados a lo largo de la temporada. Lo que hace es crear la dicotomía entre el lado bueno y el oscuro de cada una, presentando un conflicto al espectador, que puede llegar simpatizar y odiar a partes iguales al mismo personaje, parecido a como ocurre con “Dexter”.

Aunque de momento no tiene previsto ser emitida en España, en Estados Unidos ya se ha anunciado la segunda temporada, que previsiblemente seguirá estando disponible solo a través de Netflix, pero que eso no os detenga. "Orange is the new black" es una serie sobresaliente que se convertirá en imprescindible para cualquier amante de la ficción.