Video Game High School, la serie para ‘gamers’
Los
videojuegos han formado parte de mi vida desde que tengo uso de razón. Siempre
recordaré con cariño esas partidas al Donkey Kong y Super Mario en la casa de
un amigo, donde nos juntábamos todos para ‘viciar’ la Super Nintendo. Creo que jugar es un hábito muy saludable que por convenciones sociales muchos pierden con el paso del tiempo. Todavía existe el prejuicio de que los videojuegos son cosa de niños o de adultos inmaduros con poca vida social exterior.
Esta
reflexión viene a cuento porque esta semana he descubierto una serie online de
lo más innovadora y entretenida que he visto en bastante tiempo. Se
trata de Video Game High School, pero que no salte vuestro detector de bazofia
para adolescentes por culpa del título. VGHS es una comedia de acción creada para la web por los
estudios Rocket Jump y escrita por Matthew Arnold (que también la dirige), Will Campos and
Brian Firenzi.
La serie se sitúa en un futuro cercano en que el acontecimiento
social más relevante son los videojuegos, que han sido elevados a la categoría
de deporte de élite en el que sus estrellas tienen una importante presencia en
los medios y en la vida diaria. El protagonista Brian D (Josh Blaylock)
es un adolescente que logra vencer, sin saberlo, a una estrella de los
videojuegos FPS (First Person Shooting) con lo que se gana la entrada a una
escuela de élite que forma a los profesionales del videojuego del mañana. Allí
conocerá a su amigo y compañero de cuarto Ted Wong (Jimmy Wong), Ki
Swan (Ellary
Porterfield) y a Jenny Matrix (Johanna Braddy) la
capitana del equipo de FPS de quien Brian D se enamora a primera vista.
A lo largo de la serie se producen las competiciones entre
los alumnos en toda clase de juegos: shooter, carreras de coches, la máquina de
bailar, etc. El componente más emocionante que fomenta este pulso entre ellos es
el ránking de puntuación, ya que si alguno de ellos deja que su marcador llegue
a la puntuación más baja es inmediatamente expulsado de la escuela.
Dejando a un lado lo pintoresco de esta sociedad tan volcada
en el videojuego, algo muy original de esta serie son los VFX (efectos
especiales) y la tecnología que se muestra en el día a día de los personajes.
No sólo aparecen todo tipo de innovaciones tecnológicas derivadas de los
videojuegos sino que podemos ver una representación muy realista de las
partidas que juegan los personajes como si realmente se metieran dentro del
videojuego.
Para ser una serie con un modesto presupuesto la calidad de
la imagen y de los efectos es bastante buena. El estilo visual es moderno y
fresco en comparación con otras series actuales pero consigue ser bastante
verosímil dentro de lo que es la ciencia ficción. Además, el humor está también a la
altura.
En la primera temporada los capítulos son cortos, de unos 10 minutos, aunque en la 2ª,
gracias al éxito y la buena acogida del público, se alargan hasta los 30 minutos. Las situaciones que se producen son las típicas que surgen
entre los jóvenes estudiantes: “mejores amigos, primeros amores y acertar el
perfecto tiro en la cabeza” como describe literalmente a la serie Rocket Jump
Studios .
Realmente no es la típica serie ingenua para adolescentes, es para auténticos gamers que verán en ella reproducidos todos los roles y
estereotipos de jugadores, escucharán bromas y un vocabulario que sólo un gamer
puede entender y se sentirán muy identificados con muchas situaciones hilarantes
relacionadas con el mundo del videojuego.
Podéis seguirla de forma gratuita desde la web de RocketJump. ¡Ya veréis como os va a enganchar! Aún hay tiempo de
ponerse al día ya que la 3ª temporada está en proceso de producción y se estrena
en el 2014.