10 momentos musicales de películas no musicales


Es un hecho: las películas musicales no son para todo el mundo. Pero hay películas que sin ser estrictamente del género incluyen momentos musicales que a todos nos encanta ver. A veces, los personajes cantan o bailan; otras veces la música simplemente acompaña de tal forma que nos hace asociar una determinada música a una película para siempre, pero todos funcionan.

Y aunque no están todos los que son y estamos seguros de que os acordareis de muchos momentos que no aparecen aquí, os dejamos con algunos de estos momentos musicales míticos (de películas no musicales) que nos encantan: 

Quédate a mi lado – Ain’t No Mountain High Enough.

Quédate a mi lado está protagonizada por Susan Sarandon, Julia Roberts y Ed Harris. Aunque tiene momentos cómicos, es un drama de los de llorar hasta deshidratarse. Uno de los momentos más tiernos de la película es el que protagoniza el personaje de Susan Sarandon con sus hijos, bailando el tema de Marvin Gaye y Tammi Terrel. Y con lo triste de la historia, se agradece.


Regreso al futuro – Johnny B. Goode

En esta mítica secuencia de Regreso al futuro, Marty se vuelve loco a la guitarra tocando Johnny B. Goode de Chuck Berry para un público que todavía no conocía el rock n’ roll. “A vuestros hijos les encantará”, termina diciendo.


El retorno de las brujas – I Put A Spell On You

La actuación musical en El retorno de las brujas es tan innecesaria como maravillosa. Bette Middler canta que da gusto, así que ¿por qué no aprovecharlo? Es uno de los momentos más memorables de la película de Kenny Ortega para Disney que nos encanta recordar en Halloween.


Notting Hill – Ain’t No Sunshine

La secuencia en la que Hugh Grant pasea por Notting Hill al ritmo de Ain’t No Sunshine, de Bill Whithers destaca no solo por su contenido emocional, sino también a nivel cinematográfico, por la complicación del plano secuencia y su preciosa ejecución.



Casi Famosos – Tiny Dancer

En Casi Famosos, la aparición de este momento musical es un punto de inflexión. Une de nuevo a los componentes de la banda, que se habían enfadado, y produce un sentimiento de pertenencia al protagonista, William,  al que Penny Lane (Kate Hudson) recuerda, muy oportunamente, “ya estás en casa”. 



500 días juntos – You Make My Dreams

La secuencia musical en 500 días juntos es tal cual la representación gráfica de ese sentimiento que nos posee cuando vamos por la calle con el iPod, una canción que nos gusta y pensamos “sí, hoy ha sido un gran día”. Cuando queremos ponernos a bailar y que se una la calle entera, pero no podemos, porque nuestra vida no es un musical. Pues así. 



 Dirty Dancing – Hey Baby


Más allá de la archiconocida escena final, uno de los momentos más recordados de Dirty Dancing es cuando Johnny (Patrick Swayze) enseña a Baby (Jennifer Grey) a bailar encima de un tronco. 


Pretty Woman – Pretty Woman

Es quizá la escena que todos recordamos de esta película, cuando el Julia Roberts vuelve de compras a las mismas tiendas de las que fue rechazada el día anterior por sus pintas y se gasta un pastizal mientras suena Pretty Woman de Roy Orbison de fondo.


Las ventajas de ser un marginado – Heroes

Las ventajas de ser un marginado es la película más reciente de esta lista y sin duda recomendable. El uso de la música es brillante a lo largo de todo el film, aunque cuando llega la escena final y cuando suena Heroes de David Bowie, es inmejorable.  



La vida de Brian - Always Look On The Bright Side of Life

El mejor final posible para la mejor comedia jamás hecha. 



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